Zelestra invertirá entre USD 1 000 y 1 500 millones en proyectos renovables en el sur de Perú durante los próximos cinco años, con el objetivo de alcanzar 1 GW de capacidad. Ya inauguró el parque solar San Martín (300 MW) y prepara la planta Babilonia (238 MW), además de otros tres proyectos por cerca de 450 MW. Su propósito principal es abastecer a grandes operaciones mineras con energía limpia, contribuyendo a la transición energética nacional.
Fecha:Tuesday 22 Jul de 2025
Gestor:INSTITUTO IDARC
Zelestra ha iniciado una de las mayores inversiones en energías renovables de los últimos años en Perú, destinando entre mil y mil quinientos millones de dólares al desarrollo de infraestructura energética en el sur del país. Esta apuesta no solo responde a una necesidad empresarial, sino a una estrategia nacional que busca modernizar y diversificar la matriz eléctrica. El despliegue se orienta a zonas estratégicas donde el potencial solar es alto y la demanda industrial, especialmente minera, se mantiene sólida.
El punto de partida fue la inauguración del parque solar San Martín, con una capacidad instalada de 300 MW, ubicado en una zona clave para la generación limpia. Este proyecto ya forma parte activa del suministro energético del país y ha sido diseñado para integrarse eficientemente al sistema interconectado nacional. Su operación representa una transición tangible hacia fuentes menos contaminantes, en un contexto en el que los precios de generación renovable han disminuido significativamente.
La inversión proyectada por Zelestra se dirige a alcanzar una capacidad acumulada de 1 GW en el corto y mediano plazo. Este volumen es comparable al consumo energético anual de decenas de miles de hogares o a la demanda constante de varios complejos mineros. Este tipo de proyectos contribuye también a reducir la vulnerabilidad energética del país frente a fenómenos climáticos extremos o escasez de combustibles fósiles.
Uno de los proyectos más relevantes anunciados en esta etapa de expansión es Babilonia, una planta solar de 238 MW ubicada en la región de Arequipa. Esta zona ha sido seleccionada por sus altos niveles de radiación solar y condiciones geográficas favorables, pero también por su cercanía a centros mineros de gran escala, lo que facilita un esquema de suministro directo y confiable. Esta instalación, junto con otras en evaluación, busca convertir a Arequipa en una de las principales plataformas solares de Sudamérica.
La infraestructura de Babilonia contempla sistemas fotovoltaicos de última generación, con estructuras móviles que optimizan la captación solar a lo largo del día. Además, se está trabajando en la habilitación de redes eléctricas privadas que conectarán esta planta con grandes consumidores, sin pasar por las redes tradicionales de distribución. Este modelo de suministro directo reduce costos y garantiza una mayor autonomía para las industrias asociadas.
Los beneficios esperados no son solo energéticos. La construcción de estas plantas trae consigo una importante demanda de empleo local, con oportunidades tanto para trabajadores calificados como para personal técnico y operativo. Asimismo, los gobiernos regionales prevén un incremento en la recaudación por impuestos y canon, lo que permitirá financiar obras de infraestructura social y mejorar la calidad de vida de las comunidades cercanas.
Energía renovable al servicio de la minería
Uno de los aspectos más novedosos del plan de Zelestra es su enfoque en el suministro energético dedicado a la minería. El modelo de negocio contempla acuerdos bilaterales con empresas mineras, mediante contratos de compra de energía a largo plazo (PPAs). Esta modalidad asegura ingresos estables para el desarrollador y precios competitivos y sostenibles para el usuario, lo que representa una ventaja mutua en un contexto de creciente presión por reducir la huella de carbono.
Las operaciones mineras son intensivas en consumo eléctrico, y cada vez más enfrentan exigencias de sostenibilidad por parte de inversionistas internacionales y mercados de exportación. Contar con fuentes renovables permite a las mineras cumplir metas ambientales, acceder a certificaciones y reducir riesgos regulatorios o financieros. Zelestra, en ese sentido, se posiciona como un socio clave para viabilizar una minería verde.
La ubicación de las plantas solares cerca de los centros de consumo también ayuda a reducir las pérdidas de energía por transporte y evita sobrecargas en la red pública. Se prevé que con estas plantas en operación, las emisiones evitadas podrían superar las 500.000 toneladas de CO₂ al año, un avance significativo en la lucha contra el cambio climático y un ejemplo de cómo el sector privado puede contribuir a metas ambientales nacionales.
Los proyectos de Zelestra no solo destacan por su escala, sino por la incorporación de tecnologías avanzadas. Las instalaciones están equipadas con paneles de alta eficiencia, sistemas de monitoreo en tiempo real y estructuras automatizadas que permiten una mayor captación solar. Estas características aumentan la generación diaria de energía y reducen los costos de operación, elevando la competitividad frente a otras fuentes tradicionales.
Además, se han implementado mecanismos de gestión ambiental para proteger los ecosistemas donde se desarrollan las obras. Se considera el uso eficiente del agua, la revegetación de áreas intervenidas y la creación de corredores biológicos que preserven la fauna local. Estos estándares responden no solo a requerimientos normativos, sino a una visión de sostenibilidad a largo plazo que busca equilibrar desarrollo económico con conservación ambiental.
Zelestra también ha señalado su intención de capacitar a trabajadores locales y desarrollar proveedores regionales, fomentando encadenamientos productivos que generen beneficios más allá del ámbito energético. Este enfoque integral refuerza la idea de que la transición energética puede convertirse en un motor de desarrollo territorial, con impactos económicos, sociales y ambientales positivos.
Con este megaplan de inversiones, Perú se posiciona como un país capaz de atraer capital privado en sectores estratégicos y sostenibles. La región sur, en particular, consolida su rol como centro de generación renovable, articulando proyectos que no solo proveen electricidad, sino que potencian otras actividades clave como la minería y la agroindustria. La estrategia de Zelestra, con sus distintas fases de desarrollo, anticipa un crecimiento ordenado y escalable.
Se espera que a medida que se concluyan las nuevas plantas y se establezcan los contratos de suministro, otras empresas energéticas sigan este ejemplo y se animen a desarrollar proyectos similares. La estabilidad normativa, la calidad de los recursos naturales y la alta demanda del sector productivo son condiciones propicias para multiplicar iniciativas en este ámbito. En paralelo, se fortalece el ecosistema local de innovación y servicios energéticos.
Finalmente, estas inversiones permiten al país avanzar hacia sus metas de descarbonización y cumplir compromisos internacionales sobre cambio climático. La diversificación de la matriz energética y la reducción de dependencia de combustibles fósiles son claves para garantizar seguridad energética, competitividad industrial y desarrollo sostenible. En ese marco, Zelestra se convierte en un actor estratégico que acelera el cambio hacia un futuro más limpio y resiliente.